No es una mala mamada ante la cámara. Se le puede dar un sobresaliente a la chica por sus esfuerzos, pero el hecho de que el chico no haya podido correrse con sus caricias sólo demuestra que todavía tiene que aprender y aprender. Deja que vea su propio vídeo y que aprenda de sus errores.
A juzgar por los gemidos de satisfacción de la chica, no sabemos quién se folló a quién al final.